Un dels fotomuntatges que ironitzaven a la xarxa sobre l’actitud de Froilán.

Una vez más, las fechorías de la familia real española han disparado el sarcasmo en Twitter. En este caso, el origen de las bromas ha sido la noticia de una pelea entre Felipe Juan Froilán de Todos los Santos, de 15 años, nieto mayor de los Reyes e hijo de la Infanta Elena, y su primo Pablo Urdangarin, hijo de la Infanta Cristina. Según las informaciones publicadas, el primero habría dado un cabezazo e intentado clavar un pincho moruno al segundo durante las vacaciones familiares en Palma de Mallorca.

Como ya ha ocurrido en ocasiones anteriores, comentarios de todo tipo inundaron rápidamente la red social Twitter, pero especialmente los sarcásticos y humorísticos, que incluyen montajes fotográficos como éste o éste . Durante la tarde del 6 de agosto, Froilán fue trendinc topic, o tema del momento, en Twitter.

¿Recordáis cuando en julio de 2007, el juez de la Audiencia Nacional Juan del Olmo ordenó el secuestro de la revista humorística El Jueves porque publicaba en portada una caricatura de los Príncipes de Asturias que consideraba denigrante? Meses más tarde, los autores fueron condenados a pagar 3.000 € de multa por un delito de injurias al Príncipe heredero, previsto en los artículos 490.3 y 491 del Código Penal español.

¿Qué pasaría hoy si una caricatura similar se publicara y difundiera en las redes sociales? Afortunadamente, las redes han hecho más difícil la utilización de este tipo de leyes para obstaculizar el derecho de la ciudadanía a debatir, criticar, comentar e ironizar libremente sobre una institución pública como la monarquía. Ya quedó bien claro con el caso del accidente de caza del Rey Juan Carlos en Botsuana en abril del 2012, y seguro que tendremos muchas más ocasiones de comprobarlo en el futuro.